La mayor parte de los padres comprenden la importancia de leerles a sus pequeños. Pero son pocos aquellos padres que prestan atención a los primeros intentos de escribir de sus niños. De hecho el escribir viene de la mano de la lectura, pues pueden escribir símbolos relacionándolos con aquellos que han visto con anterioridad.
La escritura no comienza con palabras o letras, comienza mucho tiempo antes. Cuando los pequeños tienen contacto con instrumentos de escritura, siendo esta ocasión la primera vez en que conectan las ideas y las reflejan en una hoja de papel. Incluso cuando solamente parecen garabatos.
En esta fase puedes animar activamente los intereses por la escritura. Puedes mostrarle cómo dibujar una figura o alguna letra. Comenten el cuento o la historia que está escribiendo o leyendo. Remarca que la escritura es práctica que le permite expresar lo que siente o piensa y que este es un serio proceso.